Grupo: Alfonso, Toño, Jesus, Alberto, Javi, Jesus (makina), Ramon, Luis, Carlos, Iñaki
Cronica`por Carlos:
Esta crónica tiene que empezar sin duda, por felicitar a Jesus por volver a salir con el grupo. ¡Animo, Gordito! a ver si te recuperas definitivamente de tus dolores del brazo y continúas en esta línea….. sin caer en la tentación de pasarte a la carretera! Nos has tenido abandonados, y a mi y creo que a todos, no has dado una gran alegría. Así, que este domingo creo que ha salido el grupo al completo…..porque no, no volvimos todos juntos. Hubo tres que se volvieron anticipadamente por motivos diversos.
A final, y después de dudar entre hacer esta excursión o la que llamamos la subida a Cenzano (que es más dura), nos decidimos por ir hasta Lagunilla-Ventas Blacas.
Esta vez salieron todos de Logroño y fui el único “lobo de Moncalvillo”. Me uní al grupo en Alberite. Ah! Compañeros; pido excusas por llegar unos minutos tarde.
Bueno, salimos cagando leches (al menos yo que me pilló un poco frío) por el camino que nos lleva hasta conectar con la carretera que sube por el Valle del Leza. La pista se convirtió en algunos momentos en camino de media ladera que nos obligó a bajarnos de bici, aunque alguno se bajo porque un perro pareció que se acercaba con malas intenciones. Sin ningún percance llegamos hasta el puente romano sobre el río Leza, donde nos hacemos la foto de rigor, y algunos comienzan a reponer fuerzas los muy tragones. En esta foto si que vamos a estar el grupo al completo, porque el Gordito, Toño y Javi nos abandonan como ya he comentado al principio (dolores varios, obligaciones familiares, excusas….)…..pero joer, sabían donde se daban la vuelta, porque nada más volver a montarnos en la bici nos encontramos con un repechón, que ni nuestros más avezados escaladores consiguieron subir montados en la bici. Creo que no hubo nadie y si me equivoco, que se manifieste el crak que lo consiguió.
Después continuamos subiendo más cómodamente y como siempre, unos van delante y otros vamos detrás. Este tramo de la ruta discurre por un monte repoblado de pino negral que parece se está desarrollando bastante bien. Algunos ya comentaron la posibilidad de volver para recolectar níscalos. Por fin llegamos al cruce donde hay que decidir si se sube a Cenzano o se baja a Lagunilla. En este punto, todos, salvo nuestro amigo Ramón, estábamos bastante de acuerdo en tirar para Lagunilla.
Llegados a la plaza realizamos avituallamiento y Aberto trató de centrarme la rueda trasera que me iba un poco frenada desde que cambié las zapatas del freno. Continuamos la vuelta, que se hace un poco más dura por el fuerte viento que nos sopla de cara….y en mi caso, además porque la rueda sigue funcionando mal y además tengo problemas con el cambio. Volvimos a parar y esta vez contrato de mecánico al “Chispas”. Consigue eliminar los problemas del cambio, pero no el rozamiento.
Con viento de cara llegamos de nuevo hasta Alberite, donde yo me despido, no sin antes que nuestro “manager del blog” solicite un voluntario para redactar esta crónica, a lo cual me presento voluntario y soy elegido tras una dura pelotera con mis compañeros…..todos querían hacer esta crónica y levantaban las manos como locos.
Bueno, me despido suponiendo que todos llegaron enteros (de cuerpo quiero decir) a Logroño.
¡Nos vemos el próximo fin de semana compañeros!
Un abrazo, Carlos (el Chopo)
Fotos
Descargar Track
Analisis del Track e IBP
Perfil de la etapa
De Vuelta Lagunilla-Ventas Blancas |
De Vuelta Lagunilla-Ventas Blancas |
Cronica`por Carlos:
Esta crónica tiene que empezar sin duda, por felicitar a Jesus por volver a salir con el grupo. ¡Animo, Gordito! a ver si te recuperas definitivamente de tus dolores del brazo y continúas en esta línea….. sin caer en la tentación de pasarte a la carretera! Nos has tenido abandonados, y a mi y creo que a todos, no has dado una gran alegría. Así, que este domingo creo que ha salido el grupo al completo…..porque no, no volvimos todos juntos. Hubo tres que se volvieron anticipadamente por motivos diversos.
A final, y después de dudar entre hacer esta excursión o la que llamamos la subida a Cenzano (que es más dura), nos decidimos por ir hasta Lagunilla-Ventas Blacas.
Esta vez salieron todos de Logroño y fui el único “lobo de Moncalvillo”. Me uní al grupo en Alberite. Ah! Compañeros; pido excusas por llegar unos minutos tarde.
Bueno, salimos cagando leches (al menos yo que me pilló un poco frío) por el camino que nos lleva hasta conectar con la carretera que sube por el Valle del Leza. La pista se convirtió en algunos momentos en camino de media ladera que nos obligó a bajarnos de bici, aunque alguno se bajo porque un perro pareció que se acercaba con malas intenciones. Sin ningún percance llegamos hasta el puente romano sobre el río Leza, donde nos hacemos la foto de rigor, y algunos comienzan a reponer fuerzas los muy tragones. En esta foto si que vamos a estar el grupo al completo, porque el Gordito, Toño y Javi nos abandonan como ya he comentado al principio (dolores varios, obligaciones familiares, excusas….)…..pero joer, sabían donde se daban la vuelta, porque nada más volver a montarnos en la bici nos encontramos con un repechón, que ni nuestros más avezados escaladores consiguieron subir montados en la bici. Creo que no hubo nadie y si me equivoco, que se manifieste el crak que lo consiguió.
Después continuamos subiendo más cómodamente y como siempre, unos van delante y otros vamos detrás. Este tramo de la ruta discurre por un monte repoblado de pino negral que parece se está desarrollando bastante bien. Algunos ya comentaron la posibilidad de volver para recolectar níscalos. Por fin llegamos al cruce donde hay que decidir si se sube a Cenzano o se baja a Lagunilla. En este punto, todos, salvo nuestro amigo Ramón, estábamos bastante de acuerdo en tirar para Lagunilla.
Llegados a la plaza realizamos avituallamiento y Aberto trató de centrarme la rueda trasera que me iba un poco frenada desde que cambié las zapatas del freno. Continuamos la vuelta, que se hace un poco más dura por el fuerte viento que nos sopla de cara….y en mi caso, además porque la rueda sigue funcionando mal y además tengo problemas con el cambio. Volvimos a parar y esta vez contrato de mecánico al “Chispas”. Consigue eliminar los problemas del cambio, pero no el rozamiento.
Con viento de cara llegamos de nuevo hasta Alberite, donde yo me despido, no sin antes que nuestro “manager del blog” solicite un voluntario para redactar esta crónica, a lo cual me presento voluntario y soy elegido tras una dura pelotera con mis compañeros…..todos querían hacer esta crónica y levantaban las manos como locos.
Bueno, me despido suponiendo que todos llegaron enteros (de cuerpo quiero decir) a Logroño.
¡Nos vemos el próximo fin de semana compañeros!
Un abrazo, Carlos (el Chopo)
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